martes, 24 de abril de 2012

Bizcocho sin azúcar

BIZCOCHO LIGHT DE VAINILLA

Bueno la historia de este Bizcocho suculento tiene su intríngulis. La razón se llama Luz Divina (íntima amiga). La cuestión es que yo siempre ando anclado a mi horno y mis fogones y en lo que se trata al horno mi amiga por cuestiones de salud ha de evitar a toda costa el azúcar. Por ello llevo tiempo investigando como hacer un bizcocho que sin ella este igual de bueno. Por un lado surgió el manitol (edulcorante obtenido de la hidrogenación del azúcar manosa), pero con la pega que utilizado en exceso puede producir efectos laxantes, por lo cual lo deseché. La fructosa , la otra opción no me inspiraba confianza y al final di con la solución, la Stevia. Es una plantita que endulza y que para colmo tiene propiedades buenísimas (beneficios en el tratamiento de obesidad y de la presión arterial, regula diabetes,mejora la ansiedad y la circulación, y por supuesto baja en calorías), la única pega es que endulza aproximadamente nueve veces más que el azúcar. Natreen ya la comercializa pues hay mucho politiqueo en contra de su producción.
Así que ahí os dejo la receta. Tened en cuenta que este bizcocho sube un poco menos que los comunes.

INGREDIENTES
-5 huevos tamaño L.
-100g de harina Bizcochona (Mercadona)
-100gr de Maizena (yo utilice flanin que era lo que tenía)
-4 cucharadas soperas de Stevia.
-80gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente 
-Una pizca de bicarbonato.
-Un sobre de levadura.
-10 g de anís
-10ml de esencia de vainilla
-Un yogurth natural edulcorado.

PREPARACIÓN
Primeramente separamos las claras de las yemas. Batimos las claras a punto de nieve ( entre mas suban mejor), añadimos yemas y seguimos batiendo. Posteriormente agregamos la mantequilla y volvemos a batir, después el yogurth y la esencia de vainilla, batimos de nuevo.
El horno lo podemos ir precalentando a 200 grados temperatura arriba y abajo. Mientras tamizamos la harina, maizena , Stevia y levadura. Una vez hecho agregamos a la vez que batimos a el preparado liquido , poco a poco ( yo lo hice de tres veces). Cuando esté todo ligado incorporamos los granos de anís  integrándolos a la masa. 
A pesar de que los moldes de silicona no necesitan ser engrasados , yo embadurné el mío de unos 26 cm con mantequilla levemente y después espolvoreé por encima con harina. Volqué la masa en el molde y di unos golpecitos para liberar posibles burbujas de aire. Bajé la temperatura del horno a 170 grados y a los 5 minutos metí mi molde unos 40 minutos ( a los 35 abrí para comprobar que estuviese hecho, como sabéis cada horno es un mundo). Pasado el tiempo de cocción apagué el horno y deje reposar 5 minutos mas. Una vez lo extraje lo deje enfriar sobre rejilla 15 minutos antes de desmoldar. Una vez desmoldado y emplatado por encima y con cuidado espolvoreé un poco de Stevia a modo de azúcar glass. Y como siempre digo.... ¡Tachaaaannn!.   
 
 

2 comentarios:

Luz divina dijo...
24 de abril de 2012, 13:42  

Y tras esta historia puedo decir que gracias a mi dulce amigo he vuelto a disfrutar del placer de saborear un buen bizcocho esponjoso con un toque suave a vainilla, con un matiz final almendrado...
En definiitiva una maravillosa excusa para compartir un buen rato con los amigos como el...

José M.R dijo...
24 de abril de 2012, 14:15  

Lo de esponjoso es cierto , la vainilla también, incluso los huevos son ecológicos de las gallinitas de mi hermano... pero lo de el sabor almendrado ......será que alguna gallina se comió una almendra¡¡, jejejejejejeje

Publicar un comentario

¿Te gusta mi blog?